La vida sigue igual.

Hace unos días escuché en las noticias televisadas en México, que el viernes había sido el día más negro en cuestión de violencia en los 3 años que lleva el gobierno de Calderón.

Esto pasaba mientras Calderón bien contento estaba en Sudáfrica, según él para estrechar las relaciones diplomáticas. La verdad de todo es que se quiso ir a pasear a Sudáfrica gratis, a costillas de todos los mexicanos. Eso sí, no se puede negar que fué a apoyar a nuestro equipo de futbol.

Y a pesar de que leemos todas las ejecuciones que hubo, (20 en Tampico, 19 en Chihuahua, etc etc) como dice la canción de Julio Iglesias..."la vida sigue igual". Porque ahora ya no se pasean como antes las ostentosas camionetas que entraban a las ciudades a buscar a sus enemigos para liquidarlos... 20, 25 y me dicen que hasta 40 camionetas... con los logos de CdG (cártel del Golfo) o mmxx..(la mafia de los Ztas), con los sicarios armados hasta los dientes.

Dicen que han corrido ríos de sangre, sangre que no toda la gente vé, por que los grupos de malosillos se encargan de "limpiar" sus fechorías. Se llevan sus respectivos "muertitos". Así que si la gente no pasa por ahí, pues sencillamente, no los vé. Porque la prensa calla la mayoría de estas matanzas. Unos periodistas están comprados, como siempre, obedecen a intereses muy fuertes, otros, simple y sencillamente, no escriben lo que sucede, por miedo.

La gente ha vuelto a realizar sus actividades normales, trabaja, sale, pasea, porque, como decía mi madre, a todo se acostumbra uno, menos a no comer.

Hoy escuchaba a un chico chileno, (Vitoko), decir en un chat político que en Chile no se permitía portar armas en la calle. Yo le repliqué que en México, las leyes prohiben la portación de armas en la vía pública. Y ?? acaso eso impide toda la violencia que se vé? cualquier zetilla hace ostentación de sus armas en público. Cualquiera !

Cuando vemos a los soldados, tenemos una mezcla de sentimientos encontrados. Por un lado, nos alegramos porque eso significa que vienen a proteger a los ciudadanos de aquellos maleantes que la policia no puede (es muchísima la diferencia de armamento), pero por otra, tenemos temor, porque eso signifca que los malosos andan muy cerca. En estos días, es común ver a un grupo de soldados rodear unas casas o edificios al más puro estilo de Swat, ésa serie gringa de televisión que podemos ver en el canal Recordar.

Pero todo tiene su lado malo. La semana pasada, mi sobrino de 18 años, que recién termina su primer año de universidad, se trasladaba del puerto de Tampico a Cd. Victoria, capital de mi estado. Iba en un camión (micro de larga distancia en argentino), y un grupo de soldados les hizo el alto. Les pidieron su credencial de elector como medio de identificación a todos los pasajeros, y él no lo traía porque el mes pasado lo habían asaltado afuera de una sucursal de un banco. Llevaba eso sí, su credencial de la universidad donde estudia. Pero los soldados no se lo aceptaron como identificación, y por eso, junto con otro pasajero varón de unos 26 años, que también viajaba solo, lo bajaron del camión. Según su profesora de derecho civil, no está permitido que el ejército mexicano haga esto, que es un abuso. Realmente era para contestarle al soldadito ése que no traía su credencial de elector porque no iba a votar en ése momento, no?

Después de un interrogatorio de media hora y de las actitudes prepotentes de los soldados, lo dejaron subir otra vez al camión, gracias a que los choferes del micro intercedieron por él. No lo conocían, pero les indicaron a los soldados que era un menor. (El inocente muchacho les preguntaba, " a poco tengo cara de malo? Llamen a mi universidad, para que vean que ahí estudio y que tengo buen promedio"). El capitán encargado del destacemento le llamó al soldado raso y le dió las indicaciones para que lo soltara.

Yo no sé si realmente sea obligatorio que uno porte sus documentos de identidad siempre. Cuántas veces no ha salido uno a comprar cualquier cosa a la tienda con sólo el billete en la mano? La actitud del soldado me hizo recordar las películas de guerra donde era necesario para todo traer sus documentos, y pienso, pero ellos estaban en guerra!

Y claro, uno cree que la vida sigue igual en México. Pero no es así. Realmente, estamos en guerra.

Los ciudadanos mexicanos somos rehenes de los grupos en conflicto, llámense Cárteles, Ztas, o el ejército mexicano.

Qué , pero qué tristeza!